Advertencia: Esta columna quizás pueda hablar mas a las mujeres que a los hombres, pero si hay hombres que quieran comprendernos un poquito mas, adelante, continúen leyendo.
Quizás abriste este artículo pensando que encontrarías consejos de moda, cómo combinar vestidos, zapatos y accesorios; o las últimas tendencias para asistir a una boda. Púes la verdad no es precisamente los consejos que encontrarás, pero sé que después de leer esto; y pido que continúes por favor hasta el final, te será mucho más fácil hallar El Vestido «correcto».
Hace poco recibí una invitación para una boda de dos amigos que amo, dicha invitación decía «ven guapa, cómoda, y abrigada de amor»; así que sabiendo que la intención de nuestros amigos era que nos vistiéramos como quisiera cada uno, decidí mi pinta como un mes antes, logré encontrar cada pieza que quería y me sentía feliz con ella. El día antes comencé a pedir un abrigo o algo para combinarlo pero sin ninguna mala intención, y eso lo sé; recibí comentarios de que lo elegido no era lo más correcto para una boda, recibí consejos sobre otros vestidos que podría ponerme, y algunos me los prestarían.
En ese momento se derrumbó todo, mi cabeza empezó a dar vueltas y mis pensamientos se hicieron un nido de ratas. Los vídeos más grandes que me hice, fue que X mujeres verían mis fotos en Instagram, Facebook y otras redes sociales y se burlarían de la manera «In-correcta» en que me vestí, me imaginé a mis amigas diciéndome que como se me ocurrió ir así vestida; Incluso a mi novio haciendo la misma pregunta (cosa que sería imposible porque es «hombre» Y la verdad sería raro escucharlo darme consejos de belleza, quienes lo conocen saben que es el vídeo más absurdo que me he armado). Además y para rematar, pensé en no ir!! ¿Pueden creerlo? Sé que sí, sé que me entienden.
Respeto en lo que cada una crea pero yo creo en un Dios que me ama, y ese mismo comenzó a recordarme muchas cosas que me había dicho antes y esos vídeos fueron poco a poco eliminados.
Saben, el estereotipo de mujer que vemos en las revistas, tv, películas, fotos etc… No es tan real , por ello creo que es estrictamente necesario que la mujer encuentre su belleza y no lo busque afuera ante los ojos de otros, porque definitivamente se va sentir más perdida. Estoy terminando un muy buen libro «cautivante» con el cual entendí el verdadero significado de la palabra «belleza», es eso que llevamos dentro cada mujer, pero que nos da miedo mostrar. Esa belleza que brota cuando estamos solas y no hay nadie quién nos diga si nos estamos riendo de manera «correcta», si estamos vestidas «adecuadamente», si la forma en que nos sentamos está bien, si nuestro peinado es «acorde», y si los colores combinan.
Es esa por la cual no tenemos que hacer ni el más mínimo esfuerzo por retocar. Pues es perfecta; es esa con la cual nos sentimos libres, capaces de conquistar cualquier cosa, es esa belleza que muchas mujeres ocultamos por temor a que no sea aprobada por los ojos del entorno. Es esa que muchas deciden esconder detrás de silicona y ropa cara, aclaro no digo que estas cosas estén «mal » el mal nos lo hacemos al escondernos detrás de eso. También es la que encriptamos entre inteligencia y títulos; especialización, master, etc… podría decir confiadamente que toda mujer es bella y protagonista de su propia historia pero algunas preferimos ser «extras» para que nadie nos vea y otras «protagonistas» para mostrar lo que todos pueden ver y conforme al modelo social, pero a la vez ocultando la niña que llevan dentro para no ser vulnerables; somos bellas indudablemente.
Conozco una mujer de avanzada edad a la cual hace poco le reconocía cuan bella es y no precisamente por sus 60-90-60, sino por la capacidad que tuvo de hacernos reír y llorar a la vez, por cómo dio vida a través de sus palabras a otros, por cómo podía mirarse al espejo y sin titubear sonreír, ella es bella.
Considero que el problema ha sido en pensar que la belleza se compra, que en algún lado o muchos, la venden. Que podemos pagar por un poco más, que es un rompecabezas el cual tenemos que armar, y que necesitamos dinero para adquirirla. La belleza como el amor no se compran simplemente SON, existen y punto.
Así que decidí librarme del gran peso de ser aprobada, y dejar de temerle a vestirme de la manera «In-correcta». Con toda esta batalla entendí que una mujer debería desnudar su alma y vestir su cuerpo, no al contrario, vestir su alma para que nadie pueda ver quién es realmente y desnudar su cuerpo para que muchos sólo busquen más de lo mismo.
La verdadera cualidad de la belleza es que no se repite, es tán diferente que quisiéramos un poco de eso en nosotras, pero lo mejor es que hay mucho de eso en cada una, tan distinta a la otra que es lo que nos hace bellas.
Me di cuenta que sin lugar a dudas me siento bella cuando soy sinceramente libre, en el momento en que sacó a esa mujer que soy cuando nadie me ve y le doy un paseo interminable por este mundo.
Espero puedas encontrar el vestido adecuado pero sobretodo que puedas ser libre para usarlo.